jueves, 12 de abril de 2007

11 de Abril

Hoy no es un día cualquiera, y nunca lo será. Sé, entre otras pocas cosas, que siempre que vea esta fecha en un calendario, un reloj, un móvil... o cualquier otro invento que nos traiga el futuro para abandonar a los relojes significara algo. Tal vez fue la primera fecha que tuvo una cuenta atrás, la primera que, en mi historia personal, se ha merecido una efemérides, un algo constante, un presente continuo. Una fecha que llevo grabada en el reverso de una pulsera de plata. Poca gente ha reparado alguna vez en lo que pone en esta pulsera y quien lo hace a veces se extraña, a veces se sorprende, a veces no le encaja con el resto de realidad que conoce... pero esas personas que se extrañan desconocen lo que todas y cada una de las letras y cifras que hay en esta pulsera significan para mí.

Hay incidentes desencadenantes de casualidades repentinas y aisladas, pero este día, hace nueve años, tal vez supuso el incidente desencadenante de todo lo que ha ido sucediendo después. Nunca habrá suficientes palabras ni canciones en el mundo para explicar qué supone y significa que lo más inalcanzable e imposible que existe en tu cabeza se haga realidad. Un espacio y tiempo determinado hace nueve años unió mi camino con otros tres caminos diferentes... éstos caminos se encontraron en aquel lugar por un motivo común; un motivo que cobró otra perspectiva totalmente diferente para mí... girar una calle, dos autobuses, un hall, un piano, unos ojos azules... aquello, existió en aquel momento, y me demostró y me enseño que si lo más grande que puedes soñar con trece años se hace realidad cualquier otra cosa puede suceder... pero, esta fecha, ese espacio y tiempo determinados, esta gran lección de la vida no sólo se remiten a eso... se remiten a que en ese momento, gracias a esos tres caminos que se unieron al mío (o yo al suyo) [y TODOS los subcaminos que se derivaron después], aprendí que hay cosas más allá de lo que puedas soñar, cosas que son TAN valiosas que no te atreves ni a imaginar, tan importantes, tan esenciales... y que esas cosas también se hacen realidad... y cuando algo más allá de lo que imaginas sucede no lo olvidas jamás.

Con los años los caminos tal vez giran diferente, tal vez cambien... pero aquel momento nunca cambiará y siempre será, como todas las cosas valiosas, Eterno Presente. El motivo de aquella cuenta atrás hasta este día, hace nueve años, era sólo uno... algo que duraría, como mucho, dos horas y que quedaría allí, en un lugar del recuerdo que tiempo después se actualizaría o no... pero el motivo de la efémerides, ahora, y cada año que ha pasado desde entonces supone TANTAS cosas! cosas, entre las que quizás, esas dos horas en concreto que crearon la expectativa y el motivo de la cuenta atrás, sean lo menos importante; y eso es lo valioso.

Es en aquel momento hace nueve años también cuando aparece algo que siempre ha estado, está y estará presente en mí. Una realidad que se creó tan solo con dos segundos que se parara el tiempo en un oceáno muy particular, ese reflejo, aunque nadie lo pueda ver, también está entre estas letras, en esta pulsera... en mí. Nunca sabes qué cosas pueden suponer cambios importantes en tu vida, y estoy segura que en aquel entonces yo tampoco lo sabía.

Hay una frase que seguro no seré la primera, ni la última persona, que la diga... pero la primera vez que yo la escribí, y fui consciente de lo que significaba, fue aquel día, en aquel lugar y por eso, la gran mayoría de las veces, es con lo único que soy capaz de condensar algo tan importante para mí como es este día: "All you can dream is all you can get" - 11 Abril 1998, Zaragoza.

...and that makes you larger than life...
"If it wasn't for them I wouldn't probably be talking to you in English now..."